El sueño de anoche, las ganas de ayer, la lluvia del amanecer...
La clase de beso que nunca se olvida y una mirada perdida...
El viento furioso, la ciudad dormida, la gente perdida y esa calle abandonada...
La caricia graciosa en medio del vacío y la burbuja estrellada...
El miedo, el vértigo, las nauseas, las sonrisas...
La melodía que escucho a través de la ventana...
Nada pudiera ser ya diferente, la historia fue escrita desde aquel momento, en aquella ocasión, con aquel sentimiento. Esa fría mirada y esa sonrisa estúpida, dejando su cuerpo en la nada...
¿Cómo puedes volver esta noche?
Aléjate de mi sueño...
Déjame aquí, dónde me pusiste un día, con estas flores marchitas y esas lágrimas invisibles...
Deja a los cuervos ese trabajo, a los arboles y a la tierra...
Tú no puedes hacer nada...
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
Criticame sin piedad si eres capaz de nadar entre mis palabras...