Gonzalo era un hombre fuerte, trabajador, compasivo, sensato, con un caminar pausado y un sólo amor en su vida... Adoraba la sonrisa de su mujer, vivía para ella, respiraba a su lado y sentía una enorme tristeza cuando la veía derramar una lágrima...
-Cáncer- dijeron... no había esperanza...
Ella se rehusó a someterse a tan violenta tortura... no la curaría, sólo tendría unos años más de vida... Pero qué son unos años más de sufrimiento a unos poco de moderada tranquilidad...Él era los brazos que la animaban a seguir, los labios que la hacían olvidar su infierno íntimo y personal... Ella era su princesa, su frágil y hermosa muñeca...
Fue con una sonrisa y un 'Te Amo' que ella se despidió... después de diez años de luna de miel, había llegado la hora... Aurora se quedó sin fuerza para seguir luchando... Gonzalo se tragó su dolor y la besó, antes de que pudiera cerrar los ojos...